Crítica de Kabhi Alvida Naa Kehna

 

Título: Kabhi Alvida Naa Kehna
Año: 2006
País: India
Director: Karan Johar
Escritor: Karan Johar, Shibani Bathija, Niranjan Lyengar
Reparto: Shah Rukh Khan, Rani Mukerji, Abhishek Bachchan, Preity Zinta, Amitabh Bachchan, Kirron Kher

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Maya (Rani Mukerji) y Dev (Shah Rukh Khan) son dos personas que por diversas causas se sienten fracasados en su vida personal, este desanimo lo transmiten a su vida de casados, por un lado maya ni siquiera estaba segura de casarse, a esto le sumamos que no ha podido tener hijos y lo ve como un gran fracaso, por el lado de Dev su carrera deportiva se vio frustrada por un accidente por lo que ahora  tiene que cumplir con un rol tradicionalmente femenino donde tiene que hacerse cargo de su casa y de la crianza de su hijo , mientras que su esposa tiene una carrera exitosa,  por todo esto se desquita con su hijo.

Es en esta vida infeliz que llevan terminan cruzándose repetidas veces en la estación de tren de Nueva York, al principio decidirán irse acercando para apoyarse de manera mutua con consejos para tratar de salvar sus destruidos matrimonios, sin embargo al sentirse de alguna manera identificados con su situación emocional y poderse comprender, los encuentros serán cada vez más frecuentes y cercanos, por lo que empezaran a brotar sentimientos mutuos.

Karan Johar regresa con un drama de infidelidades, en su dirección retoma muchos convencionalismos que venía implementando en sus anteriores películas, incluso algunas que no estén dirigidas por él cómo es el caso de "Kal Ho Naa Ho" (2003). Podemos ver un claro sello distintivo, la película se mueve entre el drama y la comedia, sin contar los musicales clásicos de Bollywood, y como la gran mayoría de películas de esta industria la primera media hora será algo pesada e irregular para ir tomando fuerza a medida que avanza la trama.

Sin embargo esta fuerza se pierde al final donde el director titubea al tratar de darle un final a sus protagonistas,  por otro lado para las personas ajenas a Bollywood algunos aspectos de la película les pueden resultar chocantes como algunos chistes y bromas recurrentes en películas de esta época, un drama muy pesado, y ciertos personajes estereotípicos. Además que el director tiende por momentos (más al inicio) hacer repeticiones de una escena desde diferentes ángulos o incluso del mismo, y esto puede resultar chocante y en momentos ridículo.

Uno de los mejores momentos que a mi parecer logra Karan Johar es durante un número musical ya que como espectadores podemos ver dos situaciones totalmente opuestas ocurriendo, en contraste tenemos a los dos personajes que están experimentando un momento muy feliz para ellos y por el otro lado podemos ver una situación que los destrozara en el futuro. Otra escena muy bien lograda es cuando acuden al Ballet, podemos ver como ciertos personajes buscan celarse sin mediar sus consecuencias y el daño que le realizaran a sus respectivas parejas, todo con una gran actuación de los protagonistas.

Aun con todo esto no logro dejarme de preguntar ¿será amor lo que sienten o un escape de sus infelices vidas? y si de verdad están intentando arreglar sus matrimonios, porque está claro que del lado de sus respectivas parejas si hay una intención de sobrellevar la relación, pero de parte de ellos los intentos son "nulos", lo intentan un día de manera burda y si no funciona parecen olvidarse. Me pregunto qué pasaría a largo plazo ¿sus destruidas vidas los complementaran y se apoyarían mutuamente o la historia se volvería a repetir? ¿Lograrían superar sus problemas personales o seguirían arrastrando a los que los rodean?

Si yo fuera alguno de ellos no sé si podría aun con todo el amor del mundo sobrellevar y tratar personas como ellos que parece que no intentan mejorar su situación personal, si es así qué le espera a las personas que los rodean. Para todos sus problemas tiene que aparecer un personaje a decirles que hacer. Es más para Maya que siempre trata a su esposo de inmaduro, al final resulta que no es así, quien en realidad es inmaduro es ella, al no poder superar sus problemas, tomarse todo como un ataque personal, estancarse y autocastigarse sin tratar de realmente avanzar en el ámbito personal, el podrá gustar de las fiestas, tratar de divertirse, pero aprende de sus errores.

Karan Johar realiza un gran trabajo del lado de la dirección (a excepción de esa manía de repetir escenas de manera dramática), pero falla al tratar de hacer que empaticemos con sus personajes cuando al final cometen los mismos errores sin aprender de ellos y se la pasan buscando la lastima de todos, (si, comprendo que al inicio y durante la película se sientan infelices, con lo que no empatizo es con su  nulo avance, solo cambian de ambiente, más no ellos). Por otro lado es una película cuyo drama es muy denso, aun con las canciones puede resultar pesado verla de una sola sentada, y más cuando al final la alargan de más.